Los dos técnicos de la asociación ‘’Eo,Eo’’ han realizado un campamento en Quito con los jóvenes de la Barriada de Santa Marianita de Manta. Junto con Katty, una misionera de MIES y 8 jóvenes, partieron por cuatro días a la capital de Ecuador. Muchos de ellos no habían salido de su entorno más cercano y para ellos fue toda una aventura conocer la gran ciudad. Tener que superar el miedo a lo nuevo, el salir de su zona de confort y superar el mal de altura fue toda una superación para el grupo. Salir de Manta para conocer y disfrutar su capital y aprender un poco de la historia de Ecuador.
La mañana del viernes consistió en visitar los monumentos más importantes del centro histórico de Quito. Las iglesias más monumentales como la de los Jesuitas o la iglesia de los Franciscanos; la Basílica del Sagrado Corazón, el Palacio Presidencial de Carendelet, el Palacio Episcopal o el Panecillo en el centro de la ciudad. Una excursión de 12 horas que culmino en la representación teatral por parte de la fundación IntiRuna, representando para los jóvenes la leyenda del gallo.
El sábado se consiguió un microbus para poder ir a la Provincia de Sucumbios y ver la cascada de San Rafale, la más grande de Ecuador. Posteriormente los chicos/as se dieron un baño en Rio Malo y conocieron la Cascada Mágica.
El domingo comenzó temprano para el grupo, por la mañana tocaba visitar el Museo de Guayasamin. Este se compone de tres zonas de interés como son: La Capilla del Hombre, el árbol de la vida (donde descansan los restos de Oswaldo Gayasamin) y la casa del artista. En la visita guiada pudieron conocer las diferentes etapas del artista, los chicos se asombraron con el carisma y el potencial de uno de los mejores artistas latinoamericanos del siglo XXI. La pasión en sus obras hacia despertar en los jóvenes la curiosidad por descubrir y conocer más sobre este artista contemporáneo. En la casa de Oswaldo tuvieron la oportunidad de tocar la guitarra de un genio de la música flamenca como fue Paco de Lucia, amigo de Gayasamin, el cual, entregó esa guitarra como gratitud por el autoretrato que le realizó el artista. Los jóvenes manabitas conocieron la pasión del pintor por los crucifijos cristiano y el amor eterno a su madre, dedicando una colección de arte donde el propio artista define de esta forma a su progenitora: ‘’Mi madre era como el pan recién nacido salido del horno. Me dio las dos vidas que tengo. Era y sigue siendo una eterna poesía’’. Seguidamente, después de la visita cultural nos desplazamos hasta la Mitad del Mundo, donde pudimos aprender de forma interactiva sobre la etnografía ecuatoriana.
Para aprovechar al máximo el viaje a Quito, el grupo fue por la mañana a la Plaza de la Independencia por presenciar el cambio de guardia.
Tras ello tocaba regresar a Manta, para los jóvenes ha sido una experiencia magnifica, llegando a formar un grupo juvenil, el cual se reunirán una vez a la semana para trabajar con su entorno más cercano todo aquellas carencias que detecten. No hay mejor forma de acabar una experiencia que continuando con fraternidad.
Por otra parte Samuel y Daniel siguen hacia delante con el proyecto, les resta aún 18 días en Ecuador. Pueden continuar de forma cercana en nuestras redes sociales o página web: www.eoeo.es.